Las empresas brasileñas mantendrán este año el ritmo de inversiones en el desarrollo de nuevos productos y procesos, incentivadas por la Lei do Bem. Eso es lo que A aprecia. Consultoría de enfoque global (GAC), consultora francesa especializada en recaudación de fondos para la innovación.
Datos del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Innovaciones y Comunicaciones, divulgados la semana pasada, indican que, en 2017, hubo una reanudación de la Lei do Bem, con el registro de 1.476 proyectos por valor de R$ 9,8 mil millones. En 2016 se registraron 1.175 proyectos, cantidad 21% inferior. Ese año, la exención de impuestos del gobierno fue R$ 1.7 mil millones mientras que las inversiones fueron R$ 8.7 mil millones.
Según Rodrigo Miranda, director de GAC en Brasil, la recesión fue el factor que victimizó las iniciativas de innovación en el país en los últimos años. “Sin embargo, según nuestros propios números, todo indica que este año se debe mantener la recuperación del año pasado”, explica.
Según el director del GAC, la Lei do Bem en Brasil se basa en el Credit Impot Recherche (CIR), de origen francés. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el CIR genera 260 millones de euros al año y se considera la medida fiscal más atractiva del mundo para las empresas que invierten en innovación.
En Brasil, la ley permite la deducción de 20,4% a 34% en IRPJ (Impuesto sobre la Renta de las Empresas) y CSLL (Contribución Social sobre la Renta Neta) de los gastos de I+D; deducción de 50% en el IPI en la compra de maquinaria y equipos destinados a I+D; y la depreciación y amortización acelerada de estos activos.
Fuente: TeleSíntesis