Diez comportamientos que hicieron de Silicon Valley el centro de innovación más grande del mundo

Región en Estados Unidos es cuna de startups y nuevas tecnologías

 

El centro de innovación más famoso del mundo, conocido como Silicon Valley, se encuentra en la región de la Bahía de San Francisco, en el estado de California. Allí nacieron algunas de las empresas tecnológicas más grandes del mundo, como Google, Facebook y Uber, además de cientos de startups que nacen a diario. La primera empresa de tecnología del Valle se fundó en 1956, y hasta el día de hoy algunos comportamientos y actitudes han moldeado la identidad de la población. Desde factores históricos hasta culturales o de comportamiento, vea algunas de estas características que han transformado y asegurado el éxito de las empresas de Silicon Valley:

 

  1. mentalidad pionera

A finales de la década de 1840 se produjo la llamada fiebre del oro, cuando el descubrimiento del metal atrajo a personas de diferentes partes del país. Algunos lograron sacar provecho del oro, mientras que otros tuvieron que reinventarse y crear diferentes oportunidades en la región, ya que volver a casa ya no era una opción. Esto hizo que tanto San Francisco como las ciudades cercanas crecieran guiados por una mentalidad pionera y en sintonía con el universo del emprendimiento y la inversión. “El contexto histórico y cultural del Valle ha creado un ecosistema único en la región. Esto permitió que germinara la semilla del emprendimiento disruptivo”, observa Anderson Godzikowski, asesor e inversor en startups, proyectos y gobierno corporativo.

 

  1. apertura a lo nuevo

La región de Silicon Valley está históricamente marcada por el surgimiento de ideas liberales e innovadoras, como el movimiento hippie. Por tanto, se ha convertido en un entorno en el que las personas tienen más coraje, quieren experimentar cosas nuevas y aceptan los cambios con mayor facilidad. Un ejemplo fue la creación de Airbnb, una plataforma de alojamiento de comunidades en línea, que se creó en San Francisco. “Si la empresa hubiera aparecido en otro lado, no creo que hubiera funcionado. La gente se resistiría mucho a la idea de meter a un extraño en la casa y los inversionistas no apostarían por el negocio”, señala el cofundador de Asteroide y CEO de Bluezup Diogo Ruiz, quien vive en el Valle desde 2017. .

 

  1. centrarse en la educación 

La Universidad de Stanford jugó un papel importante en el crecimiento de la región. Desde el surgimiento de la primera empresa, la institución ha trabajado en sociedad con la investigación y la formación de estudiantes para las nuevas exigencias del mercado. Hoy, tanto la Universidad de Stanford como la Universidad de California son actores clave en el éxito de la región y atraen a estudiantes interesados en oportunidades en el área de las nuevas tecnologías.

 

  1. Respeto a la diversidad cultural 

Según datos de 2016 de Silicon Valley Indicators, el 37,51 TP2T de la población es extranjera (la media nacional es 13,51 TP2T) y aproximadamente el 511 TP2T habla un idioma distinto del inglés. Esto muestra la diversidad cultural de la región y afecta directamente la forma de vida. Un entorno plural en culturas y hábitos, que respeta y acepta estas diferencias, favorece el surgimiento de nuevas ideas y garantiza soluciones y visiones diferenciadas.

 

  1. pensamiento global 

Anderson señala que mientras que en Brasil, la mayoría de las veces, los empresarios crean negocios teniendo en cuenta las necesidades locales, en el Valle el entorno multicultural fomenta que las ideas se piensen de manera más global. Esto se debe a que el emprendedor que se encuentra en el Valle está constantemente expuesto a nuevos interrogantes y necesidades que no siempre forman parte de su vida. El resultado de esto son nuevos desafíos y oportunidades.

 

  1. espíritu innovador 

El llamado espíritu innovador se estimula en entornos donde las personas están más dispuestas a probar cosas nuevas, como es el caso de Silicon Valley. Con esto, el emprendedor tiene más confianza para inventar y crear porque sabe que a alguien le gustará su idea, por loca que sea. En un entorno más tradicional, la probabilidad de que esta idea sea criticada y desalentada es mucho mayor. De esta forma, la personalidad innovadora tiende a perder espacio en los ambientes tradicionales.

 

  1. mentalidad colaborativa

En Silicon Valley, la gente busca oportunidades, ideas y negocios. Así, esta colaboración en el mundo empresarial se ha convertido en algo natural y beneficioso para todos. “Cuando llegué a la región, recibí ayuda de un amigo, quien me conectó con otras personas. Esta cultura de colaboración es muy fuerte”, dice Diogo. Además, estar conectado con un mayor número de personas, desde becarios hasta directores generales, puede ser un factor determinante para el éxito. “La velocidad con la que se están dando los cambios es muy grande. El tipo al otro lado de la mesa puede tener, al día siguiente, una idea que revolucionará el mundo. Por eso todos se respetan, sin prejuicios”.

 

  1. Búsqueda constante de nuevos retos

En Silicon Valley, la gente trabaja con un propósito, con una idea que puede cambiar el mundo, y no solo por el dinero. Esto es lo que atrae y motiva a la gente de la región. Lo que distingue al empresario del Valle es que sueña en grande. Con eso, el dinero será consecuencia de esta lógica: cuanto más alto sueñes, mayor será la ganancia cuando el negocio prospere.

 

9. Enfócate en un propósito

La Universidad de Stanford jugó un papel importante en el crecimiento de la región. Desde el surgimiento de la primera empresa, la institución ha trabajado en sociedad con la investigación y la formación de estudiantes para las nuevas exigencias del mercado. Hoy, tanto la Universidad de Stanford como la Universidad de California son actores clave en el éxito de la región y atraen a estudiantes interesados en oportunidades en el área de las nuevas tecnologías.

 

10. Valorando el capital humano

Una startup solo obtendrá inversión si tiene un equipo competente. “Hay un dicho que dice que una mala idea en manos de un mal equipo se rompe, una mala idea en manos de un buen equipo se convierte en una buena idea, y una buena idea en manos de un buen equipo se convierte en unicornio”, destaca Diogo Ruiz . Por ello, el capital humano es muy valorado por las empresas de Silicon Valley, que ofrecen ambientes de trabajo más saludables, que estimulan la creatividad y que buscan involucrar a su equipo a través de sus valores y propósitos.

 

 

Fuente: Gazeta do Povo.

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